miércoles, 7 de noviembre de 2012

EL UMBRAL DE LA NOCHE - Stephen King

Primera edición original en inglés en 1978.
Editado en castellano por Random House Mondadori.
Traducción de G. Vlatilica y E. Goligorsky.
Edición en bolsillo 418 páginas.  
 
Comentario del libro.
 
Stephen King nunca ha sido un escritor muy valorado por la crítica "respetable" (aunque parece que eso está cambiando ultimamente), pero entre los aficionados al terror suele figurar siempre como uno de los autores clave del género. En realidad pocos autores bestsellers actuales que se dediquen al terror suelen conseguir tanta unanimidad durante tanto tiempo entre los aficionados. No es una cuestión de vender más o menos, sino de haberse labrado una trayectoria a lo largo de décadas que lo ha colocado por fuerza entre los grandes clásicos. Muchos de los que critican a King parecen no perdonarle el que venda muchos libros (o que publique tantos), pero sobretodo que sea un autor casi siempre ceñido a un género de tan dudosa reputación como es el terror. 

Opino que la mala fama de Stephen King se debe sobretodo a la infinidad de versiones cinematográficas que se han hecho de sus obras, ya que quitando algunas honrosas excepciones esto ha motivado verdaderos engendros de pésimo gusto. Eso lo ha puesto en el punto de mira de los exquisitos y favorece la mala costumbre de criticar lo que en realidad no se conoce. Muchos de los que lo maldicen como mediocre y comercial ni siquiera lo han leido, así de simple. 

Un vez dicho esto hay que tener en cuenta otro factor: Una obra tan abundante como la suya por fuerza aglutinará tarde o temprano un número importante de obras de menor calidad o directamente malas. Es imposible mantener siempre el listón a la misma altura. Pero igualmente el número de buenas obras es bastante elevado, sobretodo en el primer trecho de su trayectoria hasta finales de los años 80, cuando los libros destacables eran casi una constante en su producción. 

Así pues, es irremediable considerar a Stephen King un autor que con el paso del tiempo ha basculado entre unas obras de calidad y otras muy mediocres con claras intenciones alimenticias. Pero el balance, a mi modo de ver, es muy positivo, hasta el punto de que algunos de sus mejores libros, auténticas obras maestras, redimen su carrera de toda la basura que haya podido acumular a lo largo de los años.

El umbral de la noche, libro que tratamos aquí, es una de esas obras que hacen que su conjunto de publicaciones se eleve por encima de la media de calidad del género. Casi todos los relatos que se recopilan en esta antología, publicada originalmente en 1978, alcanzan un nivel más que aceptable y entre ellos hay algunas joyas literarias. Además, muchos de estos relatos presentan ideas que después se han desarrollado muy ampliamente en sus novelas, lo cual suma un interés para conocer la evolución de este escritor. Esas ideas están aquí en estado puro, en forma de relatos que son efectivos como una maquinaria de relojería, hechos con un oficio más que evidente y a la vez con la espontaneidad del que comienza su carrera. 

Como el propio Stephen King dice en el prefacio, por cierto muy interesante para conocer algunas de sus opiniones sobre el género de terror, él prefiere centrarse en el argumento, siempre tratando de atrapar al lector con la trama, todo lo demás es secundario. Aunque eso no quita que en el fondo cuide mucho un estilismo que con los años se ha vuelto muy reconocible y depurado. La marca de fábrica de King, que quizás se ha terminado por convertir en una fórmula, para bien o para mal, se basa en el tratamiento eficaz de los personajes, algo que lógicamente es más evidente en sus novelas. En estos relatos, por claros motivos de espacio, los personajes solo pueden ser construidos de forma muy somera, y aun así King logra darles la profundidad necesaria para que tengan mucho peso en la historia y para que empaticemos de alguna manera con sus desventuras. Por lo demás suelen ser personajes basados en lo que podríamos decir gente corriente. Nada de heroes infalibles, ideales o moralmente impecables. Jubilados, estudiantes, obreros, delincuentes, matrimonios en vía de divorcio, pequeños empleados, camioneros, etc, desfilan por sus páginas enfrentándose a la quiebra de una realidad que hasta ese momento parecía ordinaria o incluso anodina.

Estos relatos dejan ver nítidamente las influencias de King, desde los autores clásicos de terror (como por ejemplo Richard Matheson, por citar uno de los más evidentes), pasando por la serie negra, el cine de serie B o los míticos comics de la editorial EC. El resultado es una mezcolanza que aun teniendo cierto regusto pulp logra innovar dentro de los tópicos del género: vampiros, catástrofes, asesinos en serie, monstruos y otras lindezas . En todo caso son relatos muy disfrutables, que incluso a veces logran asustar o al menos intranquilizarnos placenteramente, y que sobretodo sirven de perfecta introducción al universo de Stephen King. si estos relatos te gustan y no has leido nada más de este autor no te lo pienses más, ahí tienes obras maestras como It, Misery o El resplandor.


Comentario de los relatos. 
 
-Los misterios del gusano.

Una mansión misteriosa, pueblos malditos, libros llenos de blasfemias e invocaciones de seres innombrables... El relato que abre la antología El Umbral de la noche es un homenaje a los horrores cósmicos de H. P. Lovecraft o Arthur Machen, así como al estilo espistolar del Drácula de Bram Stoker. Podemos decir que es un puro pastiche hecho a conciencia por un fan declarado de esos autores clásicos, pero eso no quita que sea un excelente relato de terror por méritos propios. Con una exquisita ambientación más que trabajada y unos personajes bien conseguidos al puro estilo King, el relato sirve, además, como una especie de preámbulo argumental para una de sus mejores novelas: El misterio de Salem's Lot

-El último turno.

En este relato se explota y se lleva a las últimas consecuencias el miedo inmemorial que el ser humano siente por las ratas, todo ello enmarcado en un corrosivo retrato de las relaciones entre jefes y subordinados. Escrito con una precisión increible, la tensión que el relato acumula y transmite hace que lo leamos con una sensación de verdadera intranquilidad.

-Marejada nocturna.

Un relato nada amable en ninguno de los sentidos que queramos buscarle. Narra un pequeño episodio en el contexto de una epidemia de gripe a nivel mundial. Idea ésta que King desarrollaría despues en su novela La danza de la muerte (publicada posteriormente en una versión completa como Apocalipsis). En este relato King se empeña en amargarnos la vida mostrando como las miserias humanas sobrevivirían incluso en medio de la aniquilación total de la especie.

-Soy la puerta.

Magnífico relato que mezcla el terror y la ciencia-ficción. Con un aire muy de cine serie-B de los 50, Stephen King condimenta impecablemente una historia sobre una secreta invasión alienígena. En mi opinión, lo mejor de este relato es su fuerza visual, perfecta para la típica estética de un comic de la E.C.

-La trituradora.

Historia inverosimil hasta más no poder. Las máquinas y objetos que cobran vida es una constante en Stephen King, pero en mi opinión este no es su más conseguido ejemplo.

-El coco.

Un relato que opino es perfecto salvo por su final, el cual me resulta muy poco sutil. Aun así es una historia memorable que explota, una vez más, un terror perenne en la imaginación humana (sobretodo para los niños): el miedo a lo que pueda esconderse en los armarios. La historia funciona a la perfección, pero creo que el final rompe con la ambigüedad que King establece entre locura o realidad y lo lleva a una literalidad muy grosera.

-Materia gris.

Uno de mis relatos favoritos de esta antología. Un ejemplo paradigmático de la capacidad de King de hacer historias en torno a personas corrientes alejadas de los estereotipos. En este caso un grupo de jubilados, parroquianos permanentes de un bar de barrio, deben enfrentarse a una amenaza monstruosa. El final es simplemente magistral.

-Campo de batalla.

Otro relato inverosimil de objetos vivientes, en este caso soldados de juguete, pero a diferencia del cuento de la trituradora éste me gustó muchísimo, con una narración perfectamente construida y una acción trepidante. El final es explosivo.

-Camiones.

De nuevo otro ejemplo de historia con máquinas vivientes. Este es para mi el mejor de esta temática que se incluye en el libro. También muestra otra constante de King, la de un grupo de personjes dispares unidos fortuitamente por las circunstancias y que son obligados a colaborar y resistir contra una amenaza. Muy buen relato, pero no le busques mucha lógica en el fondo, lo cual es lo de menos.

-A veces vuelven.

Este relato no me gustó mucho. La idea es interesante, pero en mi opinión refleja lo peor de King, en este caso una cierta chabacanería que si se pasa de rosca estropea la historia. Una historia de terror sobrenatural sin sutileza alguna. Este es el tipo de historia que parace anticipar todas las adaptaciones cinematográficas penosas que se hayan podido hacer sobre las historias de Stephen King.

-La primavera de fresa.

Narra la historia de un psicópata asesino que actúa solo en ciertas circunstancias. El final es muy predecible, pero aun así es un verdadero placer llegar hasta él. Con este cuento King parace querer demostrar que también sabe escribir "artísticamente", y lo cierto es que es de un estilo muy florido, casi experimental, pero sin impedir por ello el efecto de misterio.

-La cornisa.

Un relato que no es estrictamente de terror, pero que mantiene una tensión indiscutible. Es admirable como el autor logra hacer unos personajes tan convincentes y que preocupes por ellos con tan solo cuatro brochazos.

-El hombre de la cortadora de césped.

Una historia escrita con un sentido del humor muy peculiar. Una nueva y ácida visión sobre los cultos paganos.

-Basta, S.A.

Magnífico cuento, otro de mis favoritos de El umbral de la noche. King suele ser bastante cruel con sus personajes. Como bien saben sus lectores habituales, no hay protagonista que salga realmente bien parado de ninguna de sus historias. Sin embargo, el final de este relato, siendo de una crueldad increible, puede decirse que de alguna manera es un final feliz.

-Sé lo que necesitas.

Un relato que comienza muy bien, se desarrolla excelentemente y que se estropea por un final muy chusco. Aun así merece mucho la pena ser leido.

-Los chicos del maíz.

Muy buen relato. En este libro hay pocas muestras de la famosa aversión de King por los fanatismos religiosos, pero este relato es un ejemplo magnífico de esa faceta que tan buenos resultados suele darle en sus tramas (por ejemplo en Carrie).

-El último peldaño de la escalera.

Otro relato que no es de terror, más bien es un drama de una gran intensidad. Es una buena historia, triste a más no poder, eso si.

-El hombre que amaba las flores.

Relato muy predecible. No está mal, pero las historias sobre psicópatas están tan manidas que hacer algo original sobre ello debe ser muy difícil.

-Un trago de despedida.

Otro relato alrededor del universo de El misterio de Salem's Lot. Está bien, aunque solo sea como un guiño a sus lectores habituales.

-La mujer de la habitación.

Esta antología termina con otro relato de tintes dramáticos que al igual que El ultimo peldaño de la escalera no contiene elementos de terror ni fantásticos. Es un relato muy triste y hasta cierto punto me imagino que en su época resultaría polémico.


Reseña de Antonio Ramírez

No hay comentarios:

Publicar un comentario